Es casi un pasillo cómico, como si el fantasma (los fantasmas, perdón) de los Álvarez Quintero hubiese poseído a muchos concejales y alcaldes del PP de nuestra hastiada España. Ahora resulta que cada vez que en cualquier ayuntamiento español gobernado por el PP se les pregunta sobre su opinión sobre:
1- La ley de reforma universitaria del impresentable ministro de cultura Wert, van y dicen que no la comparten, que habrá que pedirle que la reconsidere, en otras palabras que no apoyan a su ministro.
2- Si otro partido de la oposición les pregunta sobre los desahucios “legales” practicados por los bancos, los alcaldes y concejales del PP, de los pueblos, van y se oponen rotundamente, argumentando que habrá que estudiar cada caso, y que, por supuesto, lo primero son las personas, luego los créditos, en definitiva que no cierran filas ante las leyes de Rajoy.
3- Si lo que se debate en el pleno de los ayuntamientos locales de media España es si los ediles del PP se posicionan a favor, o en contra, de los recortes aplicados a la sanidad pública o la educación, los gavioteros responden con equívocas abstenciones, con lo que tampoco respaldan con claridad a su gobierno rajoniano.
Podríamos seguir poniendo ejemplos hasta aburrir a la clientela, pero ¿para qué?, ellos solos se descalifican. Al fin y al cabo son tan poco sinceros que dicen gobernar con las siglas del PP, pero cuando tienen que defender las leyes bárbaras que estos engendran, argumentan que una cosa es la política nacional y otra la local. Pues eso es una falacia, punto. No puedo ser del PP en España y de Izquierdas a nivel local. No hijo no. Somos lo que somos con todas sus consecuencias. Del Betis, manquepierda. Gobernar con dos discursos, con dos barajas, con dos caras, es engañar, o mejor dicho, intentar engañar. La gente no se lo cree. Mire usted soy de derechas o soy de izquierdas, y sea de lo que sea soy coherente, y vivo como pienso, y mis palabras deben vestir mis actos, todo lo que no sea así es hipocresía y malversación de ideas. Si soy del PP, lo soy, y estoy apoyando los desahucios, y estoy favoreciendo que solo estudien los hijos de los que tienen poder económico, y estoy ayudando a que los medicamentos y las pruebas médicas se conviertan en un lujo al alcance de unos pocos adinerados, y estoy alentando a que se despida a los trabajadores sin indemnización alguna, y estoy amparando a quienes deciden que la cultura en España tenga que pagar tantos impuestos que propiciemos volver a la Edad Media, donde la ignorancia era la madre de todos los males.
Una curiosidad ¿POR QUÉ LA GENTE DE IZQUIERDA DECIMOS ORGULLOSOS SOY DE IZQUIERDAS y LOS DEL PARTIDO POPULAR LO SILENCIAN, en sus invitaciones, en los votos que mandan a nuestras casas para que les votemos, lo ocultan con sigilo?
Seamos honestos, yo soy de izquierda, ¿y tú, de quien eres?