viernes, 3 de febrero de 2012

Así nos pinta el pelo


Por Rubio.

¿Dónde vamos a ir a parar? Que si noticias por aquí, que si mentiras por allá…pero los únicos afectados de verdad son los alumnos; pero no sólo los alumnos de hoy. La famosa LOGSE nos condenó educativamente: ¡qué suerte tuve yo en mi EGB, mi BUP, mi COU, mi Universidad, con mis suspensos… y no me pasó nada! Bueno sí, a superar frustraciones, entre otras cosas (como a aprender).

Bueno, que me voy por las ramas.

Que mal huele el tema de los profesores de secundaria y sus huelgas, cosa que parece que se va apagando poco a poco o al menos ya no les dan tanto bombo en la maravillosa tele (eso es porque ya no conviene). Educación Pública, SI. Por supuesto, ¿quién lo duda?…pero qué mal les ha quedado a esos profesores esas manifestaciones a destiempo. ¿A destiempo? Sí…a destiempo. Y me explico: es que ha dado la sensación TOTAL de que han venido esas manifestaciones a raíz de que les aumenten las horas (y fíjese usted que me he venido a enterar que eran sólo 18 horas lectivas… O eso nos cuentan). ¿Y ahora nos ponemos a manifestarnos? Ahora sí, ¿no? Es que me sigue chirriando que parezca que nunca nos hemos sublevado porque nos preocupásemos de los alumnos. Sólo porque recortan, recortes recortes… Me explico:

¿Por qué nunca nos hemos echado a la calle para exigir que se recorte la Ratio y se pasen en las aulas de veinte-pico (incluso treinta) a dieci-tantos? Eso hace calidad, atención e individualización al alumnado.

¿Por qué no nos hemos echado a la calle cuando COPIAMOS en su tiempo una ley que se sabía no funcionaba en otros países europeos?

¿Por qué no nos echamos a las calles para que implantemos sistemas educativos europeos punteros números uno mundiales, con sus matices culturales, por supuesto?

¿Por qué no nos hemos echado a la calle por no destinar un tanto por ciento del PIB en Educación como se hace en países donde la educación sí funciona como nos gustaría?

¿Por qué no nos echamos a la calle cuando se aprueba (y se materializa) la entrega de ordenadores a alumnos de 10-11 años, despilfarrando millones de euros al año?

¿Por qué esos profesores que se tiran a las calles no lo han hecho antes sabiendo que esos ordenadores necesitarían un técnico informático (como mínimo) por centro y buenas conexiones a internet y saben que no van a servir para mucho?

¿Por qué no hay manifestaciones denunciando que hay un desperdicio de recursos que cada vez son más limitados?

¿Por qué no nos hemos tirado a las calles para que con esos millones de euros anuales se hagan colegios y se contrate personal, reduciendo así las Ratios de las aulas, aumentando la calidad de enseñanza en España?

¿Por qué no nos hemos tirado a las calles para que la Educación DEJE DE SER UN ARMA POLÍTICA, la cual se va modificando en función de la legislatura que toca?

¿Por qué los docentes no nos hemos tirado a las calles cuando se nos han inventado de repente tantos colegios bilingües, y para habilitarnos nos basta con un curso de 90 horas de inglés? ¿Eso es calidad educativa?

¿Por qué no nos echamos a las calles exigiendo que se invierta en Educación, que es la inversión más segura y rentable?

¿Por qué no nos echamos a la calle para que se cambie un sistema de contratación en la cual se permite que algunos docentes se den de baja con asiduidad y se mantengan en su puesto de trabajo a docentes cansados de niños? ¿O alguna vez se ha escuchado una noticia tal que “han despedido a Don Facundo o a Doña Felisa por dejadez en su trabajo”? O que levante la mano el que no tenga en su centro de trabajo a algún “compañero” del cual podría prescindir.

¿Cuándo nos hemos echado a la calle defendiendo que nuestros estudiantes no son más que la suma de los resultados de sus exámenes?

¿Cuándo hemos exigido que nos nuevos educadores, maestros, profesores han de ser esos que de verdad les apasione la enseñanza, estén concienciados y dispuestos a llegar a los 65 años y seguir trabajando para los niños con la misma ilusión; y NO los que quieren estudiar o han estudiado magisterio para aprobar unas oposiciones y tener un trabajo fijo, con sus vacaciones, tan criticadas por todos, pero menores que las del resto de Europa; NO los que lleven 10 años trabajando para los niños y ya estén quemados; NO para los que no siguen estudiando o ampliando conocimientos y recursos?

Por eso sigo pensando que aunque no sea así, parece que nos echamos a la calle a manifestaciones sin sentido (porque no van a cambiar las decisiones salomónicas) cuando nos han tocado lo nuestro; cuando nos han tocado las horas de trabajo y se han de echar dos horitas más.

Para cambiar algo en educación se ha de invertir en ella de verdad y eso significa DINERO. Y aquí, en España, si no se van a ganar votos con el dinero que se da a educación NO TRAE CUENTA.

Así nos pinta el pelo.

5 comentarios:

  1. Se te ve el plumero4 de febrero de 2012, 18:35

    Qué casualidad que al abnegado, honrado, y desinteresado ponente se le han pasado por alto algunas cosas como las siguientes:

    ¿Por qué os echais a la calle cuando sólo se os exige dos horas más de trabajo con el argumento del ahorro, si está muy bien que mientras tanto se le den miles de millones de euros a la enseñanza privada y concertada?

    ¿Por qué el estado se gasta millones de euros en pagarles el sueldo a unos profesores de religión que no han pasado por oposición alguna y que son nombrados (enchufados) por la Iglesia Católica directamente, aunque los costeamos los contribuyentes?

    Auuí hay tufillo a uno que no ha podido superar unas oposiciones y ser funcionario.

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  2. Bla bla blas...pero es verdad!

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  3. Se te vio el plumero6 de febrero de 2012, 10:20

    Al Sr. se te ve el plumero: personas como tú, visto tu comentario, sois parte contribuyente al problema. Lo obvian y desvían atacando...
    ¿A QUIÉN SE LE VE EL PLUMERO?

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  4. ¿Hacer ver el sesgo interesado de un artículo es atacar? Pues vale, pero cuando se escriben medias verdades omitiendo una parte fundamental del problema como es el desvío de cuantiosos fondos públicos a las escuelas privadas concertadas y a los profesores de religión, simplemente se falta a la verdad.

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  5. Curiosa forma de manipular lo que nos cuesta la pública y la privada:
    El 24 de enero, el diario asturiano La Nueva España, su nombre lo dice todo, difunde la noticia titulada “La concertada le sale barata al principado” que, en su portada, adelantaba como “Un alumno de la concertada le cuesta al principado casi tres veces menos que uno de la enseñanza pública”. El bloguero Carlos Gabitones ha desmontado la falsedad de ese dato en su página con tremenda rigurosidad. La trampa consiste en que, mientras para el cálculo del gasto destinado para los alumnos de la escuela concertada se limitan a sumar el gasto de los alumnos de infantil, primaria, secundaria y FP, para el cálculo del gasto del alumno no universitario de la pública toman el presupuesto completo de la Consejería de Educación y Universidades, le restan el dinero dedicado a la enseñanza concertada y lo cifra resultante la dividen por el número de alumnos de infantil, primaria, secundaria y FP de la pública. De este modo incluyen en el gasto por alumno de esta enseñanza pública el coste de la Universidad de Oviedo, las escuelas de idiomas, las enseñanzas artísticas (conservatorios, escuelas de teatro, etc.), los servicios complementarios de transporte, comedores, ayudas para libros y material, la formación del profesorado, la construcción de infraestructuras y la propia administración de la consejería.

    Así nos luce el pelo.

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