Decía Pablo Neruda que él no llevaba un dogma debajo del brazo para tirárselo a la cabeza a nadie. La derecha no lee a Pablo Neruda, está claro. Están tan rellenos de dogmas, que dan ganas de comérselos. Uno de sus sofismas más cacareado es aquel que defiende que el crecimiento económico precisa de una reforma laboral, mentira que se ha desmontado por sí sola años después, cuando comprobamos que, efectívamente ha habido un crecimiento, el de los beneficios de los bancos y las grandes empresas a costa del abaratamiento del despido, o directamente el despido libre. Si ustedes quieren contrastar lo que la derecha nos vende, hagan una cosa: apunten la retahíla de fantasías que a diario recitan los gobernantes como logros conseguidos estos tres últimos años, luego, sin soltar el papel, visiten a media docena de vecinos, familiares o amigos, y pídanle opinión sobre lo dicho por nuestros gobernantes. Ni una coincidencia, ¿verdad?
Pues ya lo tienen ustedes claro, si queremos ser conscientes de los avances o retrocesos, de la mejoras o empeoramientos, sólo miremos a nuestro alrededor, quizás no sea necesario ni preguntar, sólo observar las colas en las urgencias, los paseos de nuestros pueblos repletos de parados, y las universidades cada vez más vacías, Eso son sus logros, esa es la verdad, el resto es mentira. Repiten con un cinismo poco brillante que su mala gestión solo es la consecuencia de lo que heredaron de gobiernos anteriores. A uno no lo eligen Presidente del Gobierno, o Alcalde, para que se le pasen los cuatro años de la legislatura diciendo lo mal que lo hicieron los anteriores. Simplemente es una perogrullada. Supuestamente ustedes están en el gobierno para hacerlo bien, mejor que sus predecesores.
Háganlo sin más. Ser de izquierdas, hoy, ha pasado de ser una ideología a ser una necesidad, Hay que recuperar todos los derechos hurtados a los trabajadores, hay que propiciar que todo el que lo desee, y esté capacitado intelectualmente, tenga acceso a una formación gratuita.
Votar a la izquierda es darnos la oportunidad de hacernos escuchar, utilízala, y no olvides que, en Carmona, tenemos una mujer capaz de abrirnos de par en par esa casa en la que todos cabemos, la izquierda.
Pues ya lo tienen ustedes claro, si queremos ser conscientes de los avances o retrocesos, de la mejoras o empeoramientos, sólo miremos a nuestro alrededor, quizás no sea necesario ni preguntar, sólo observar las colas en las urgencias, los paseos de nuestros pueblos repletos de parados, y las universidades cada vez más vacías, Eso son sus logros, esa es la verdad, el resto es mentira. Repiten con un cinismo poco brillante que su mala gestión solo es la consecuencia de lo que heredaron de gobiernos anteriores. A uno no lo eligen Presidente del Gobierno, o Alcalde, para que se le pasen los cuatro años de la legislatura diciendo lo mal que lo hicieron los anteriores. Simplemente es una perogrullada. Supuestamente ustedes están en el gobierno para hacerlo bien, mejor que sus predecesores.
Háganlo sin más. Ser de izquierdas, hoy, ha pasado de ser una ideología a ser una necesidad, Hay que recuperar todos los derechos hurtados a los trabajadores, hay que propiciar que todo el que lo desee, y esté capacitado intelectualmente, tenga acceso a una formación gratuita.
Votar a la izquierda es darnos la oportunidad de hacernos escuchar, utilízala, y no olvides que, en Carmona, tenemos una mujer capaz de abrirnos de par en par esa casa en la que todos cabemos, la izquierda.
Encani es tu voz, y tú, el dueño de tu voto
Estimado Manolo. La utopía está muy bien, sin ella no avanzaríamos aun cuando nunca la alcanzáramos, pero restringirla a que es "de izquierdas" me parece una exageración, así como la idea machacona de que la derecha (así en general, sin particularizar qué parte de la misma) tiene la culpa de todo, sobre todo del retroceso social, político y económico, pero te recuerdo que en esta Andalucía nuestra, y por mor del estado de las autonomías y las transferencias que de ello derivaron, gran parte del retroceso es responsabilidad también de un partido que dice ser "de izquierdas" y en estos tres últimos años apoyado y en co-gobierno por otro partido aun más "de izquierdas", y que los recortes en sanidad (menos personal, menos camas, etc) y en educación (menos profesores, menos dinero para los centros educativos, pero sí mucho malgasto) son responsabilidad de esos partidos "de izquerdas". Cada cual cargue con sus responsabilidades, el Gobierno Central con las suyas, que las tiene y grandes, pero el autonómico también con las suyas.
ResponderEliminarAh, y también estoy convencido de que Encarni será mejor alcaldesa que Juan Ávila o el anterior.